Cuando pensamos en invertir o en inversión, lo primero que nos viene a la mente son las inversiones relacionadas al dinero. Las inversiones financieras ayudan cuando tienes un capital considerable y le puedes sacar provecho a los beneficios de los instrumentos financieros del mercado. Invertir en ti mismo es tan importante (o mucho más) como invertir el dinero. El valor de invertir en ti mismo es incalculable y aquí te mostraremos como invertir en tu mayor activo, tu propia persona.
Hay que convivir con él y seguir adelante
En una sociedad, como la nuestra, que estimula la competitividad como «modus vivendi» y encumbra a los ganadores sin grandes miramientos al precio que han pagado por serlo, está fatal visto ser un perdedor.
En realidad, ser «un fracasado» es un estigma, uno de los peores calificativos que podemos atribuir a una persona. Pero vayamos por partes. Ni la familia ni la escuela, ni mucho menos los medios de comunicación, nos han educado para asumir las derrotas y digerir los fracasos sin traumas que amputen nuestra capacidad de reacción o afecten gravemente a nuestro bienestar personal. Ese rechazo social del fracaso va configurando en nosotros un fuerte mecanismo defensivo, una dificultad a reconocer los fallos o nuestras propias limitaciones. Quizá esta incapacidad se deba a que entre los derechos humanos no se halla el de cometer errores y responsabilizarse de ellos.
Aprender a relajarse
Informarse como hacerlo
Practicar diariamente técnicas de respiración diafragmática
Relajación muscular
Dormir lo necesario
Intentar dormir unas 8 horas al día
No acostarse tarde
Realizar actividades relajantes antes de ir a dormir (leer, escuchar música tranquila…)
Evitar excitantes
No consumir drogas
Evitar té y cualquier otra bebida excitante
Moderar el consumo de tabaco y alcohol
Heridas severas o cirugías reconstructivas alteran considerablemente la apariencia visual de los pacientes, muchas personas sufren desordenes psicológicos tratando de ajustarse a su nueva realidad.
Sentirse cómodo con uno mismo y causar una buena impresión a otros puede mejorar sorprendentemente nuestro autoestima y ayudarnos a continuar con nuestra vida. Para ayudar y acelerar este proceso, el Dr. Joseph Haik, un cirujano plástico y especialista en quemaduras de Tel Aviv University y director de la unidad de quemaduras de Sheba Medical Center-Tel Hashomer Hospital’s, ha estado recomendando a muchos de sus pacientes el accesorio EyeToy del Sony PlayStation.