Heather Logrippo cuenta que sus empleados no se mostraron muy entusiasmados cuando les entregó papel y crayolas y les dijo que encontraran un lugar tranquilo por 30 minutos.
La tarea poco convencional, en que se les encargó a los empleados que usaran las crayolas y el papel para generar ideas sobre un programa de incentivos para los clientes, formaba parte de un intento para aumentar la eficiencia de las reuniones de personal, dice Logrippo, propietaria y editora de Distinctive Homes, una revista mensual con sede en Boston. Logrippo pensó que los materiales ayudarían a los empleados a generar sugerencias creativas.
«Esta era una situación en la que no se podía encontrar la respuesta en Google», dice. «Volvieron con excelentes ideas».
En tiempos de crisis, algunos pequeños empresarios están buscando maneras más creativas de sacarle partido a las reuniones de personal, algo que esperan se refleje en última instancia en los resultados de la compañía.