Dicen que el éxito cuando se trata de innovación consiste no tanto en tener buenas ideas, como en llevarlas a la práctica. Dicen que nos sobran buenas intenciones, nos sobran sueños y nos falta acción. Por eso la gran palabra mágica es actúa: ¡Hazlo! Sí, sí no pienses, pues el universo conspira a favor de los que se atreven actuar, sin tener todos los datos, los que deciden que ya cambiarán de rumbo por el camino o incluso de destino.
Pero, también dicen que el éxito cuando se trata de hacer cosas innovadoras consiste en saber salir de la caja de vez en cuando, en pararse y dejar de actuar: ¡Párate!. La acción, especialmente la basada en el hábito, nos adormece nuestra capacidad de plantearnos por que hacemos lo que hacemos. Estamos tan ocupados haciendo cosas que nos olvidamos de plantearnos los “porqués” y vamos perdidos en la falsa seguridad de la acción que actúa como tranquilizante.