Del 12 al 13 de junio del 2000 tuvo lugar en Herndon, Virginia, Estados Unidos, un “workshop” titulado “Scientific Evidence on Condom Effectiveness for Sexually Transmitted Disease (STD) Prevention”, para examinar la evidencia científica en lo que respecta al preservativo. En él participaron varias agencias federales de esta nación, que prepararon el resumen que contiene las conclusiones de esas reuniones. Dicho resumen no fue emitido hasta un año después.
El propósito de estas reuniones de expertos durante las cuales ellos examinaron los estudios sobre el preservativo, era responder a la pregunta: “¿Cuál es la evidencia sobre la efectividad del preservativo de látex que usan los hombres para impedir las enfermedades de transmisión sexual (ETS) durante las relaciones sexuales vaginales?” La respuesta que ellos mismos dan en dicho resumen es : “En general el panel encontró que la información epidemiológica que ha sido publicada es inadecuada para responder definitivamente a la pregunta que se hicieron los participantes” . Sin embargo, las organizaciones antivida que promueven el uso del preservativo como “sexo seguro”, se han vanagloriado de que el ya mencionado resumen confirma sus reclamos ; pero no han comentado sobre ciertos hechos muy importantes con respecto a estos estudios, quizás porque sus argumentos a favor del preservativo perderían credibilidad. Examinemos algunos de estos hechos.
Un equipo de investigadores de Sierra Sciences, trabajando en conjunto con científicos de TA Sciences, Geron Corporation, PhysioAge, y el Spanish National Cancer Research Center, anuncia el descubrimiento de un compuesto derivado natural conocido como TA-65, que puede activar el gen telomerasa en humanos. La activación de este gen podría prevenir que se acorten los telómeros (que se encuentran al final de los cromosomas), recortando y hasta deteniendo el proceso de envejecimiento (aunque antes de que nuestros lectores se preparen para la inmortalidad, deberíamos señalar que se cree que los humanos tienen un tiempo de vida máximo de 125 años). Además de recortar el envejecimiento celular, los investigadores alegan que el TA-65 puede tratar enfermedades que atacan el sistema inmunológico.
Mucho más optimista que su tocayo el ex presidente de EEUU Bill Clinton, se ha mostrado Bill Gates, fundador de Microsoft y presidente de la Fundación Bill & Melinda Gates. El filántropo cree que “tenemos una oportunidad única para cambiar la cara a la epidemia de sida” y, aunque sea difícil, afirma que “vamos a estar aquí, al pie del cañón, hasta que lo logremos”.
Análisis de diagnóstico precoz para todo aquel que lo desee o tratamientos más sencillos y más rápidos son algunas de las iniciativas
El verano de 2010 será el momento cuando Marcos Díaz unirá los continentes nadando para regar la voz, que la gente del planeta conozca y promueva los Objetivos de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas.