El número de personas que recibe tratamiento antirretrovírico (ARV) para controlar los síntomas del SIDA alcanzó una nueva cifra récord en el año 2010, y el número de nuevas infecciones se redujo en un 25 por ciento, en promedio, entre los años 2001 y 2009, según constata un nuevo informe de las Naciones Unidas.
India y Sudáfrica, los dos países con el mayor número de personas con VIH/SIDA, registraron un descenso aún mayor de nuevas infecciones; en la India fue superior al 50 por ciento y en Sudáfrica, al 35 por ciento. El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA) informó de estas cifras en su informe mundial sobre el estado de la enfermedad, titulado Treinta años de sida: las naciones en un punto clave del camino.
El número de personas que recibe tratamiento se ha multiplicado 22 veces desde el año 2001, alcanzando los 6,6 millones de personas en países de ingresos bajos y medios. En el año 2010 solo, 1,4 millones de personas iniciaron por primera vez el tratamiento antirretrovírico. Disponible desde mediados de la década de 1990, este tratamiento puede permitir a una persona que padece VIH vivir casi un período de vida normal de años sanos y productivos. Compárese esa perspectiva con la pena de muerte que afrontaba una persona en el momento del diagnóstico con el VIH en los primeros años de la pandemia.
“La terapia antirretrovírica es ahora más que nunca un gran motor para el cambio: no solo impide que las personas mueran, sino que también evita nuevas infecciones por el VIH en hombres, mujeres y niños”, dijo Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA.
Si bien hay avances que se han de celebrar en la pandemia del SIDA transcurridos los 30 años desde su aparición, otras estadísticas subrayan que la carga de la enfermedad sigue siendo inmensa. Se calcula que 35 millones de personas padecen la enfermedad en la actualidad, y que unos 30 millones han muerto debido a ella. El porcentaje de personas que recibe tratamiento ha alcanzado una nueva cifra récord, pero la cantidad de personas que no recibe tratamiento sigue siendo importante.
“Todavía hay un gran déficit de tratamiento”, según informa el comunicado de ONUSIDA. A finales de 2010, aproximadamente nueve millones de personas elegibles para recibir tratamiento no podían acceder a este. El acceso para los niños es aún más limitado que para los adultos: sólo el 28 por ciento de los niños recibía terapia antirretroviral, mientras que para las personas de todas las edades la cobertura era del 36 por ciento, según indica el informe.
Los grupos en los márgenes de la sociedad que tienen mayor vulnerabilidad a estar expuestos al riesgo de infección de VIH también tienen menos probabilidades de recibir tratamiento antirretroviral, según el informe de la ONU. Entre estos grupos cabe destacar a los drogadictos que se inyectan drogas, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, trabajadores sexuales y transexuales.
La tasa de nuevas infecciones ha disminuido desde que alcanzara su cifra máxima en los últimos años, pero el número de infecciones nuevas es de 7.000 cada día. Las nuevas infecciones revelan una reducción acumulada en todo el mundo, pero en Europa oriental, en Oriente Medio y en el norte de África la tasa de nuevas infecciones ha aumentado, según datos de ONUSIDA.
La Asamblea General de la ONU está celebrando un período extraordinario de sesiones de 8 al 10 de junio para evaluar el estado de la pandemia y para reafirmar el compromiso de la comunidad de las Naciones Unidas en la lucha contra la misma.
La secretaria de Estado Hillary Rodham Clinton emitió una declaración que reconoce los 30 años y que hace hincapié en el compromiso de Estados Unidos para superar la enfermedad, como ha quedado demostrado a través del Plan de Emergencia del Presidente para el Alivio del SIDA (PEPFAR), que ha proporcionado tratamiento ARV a más de 3,2 millones de personas.