Económicamente está siendo un año duro para la prensa y también para The New York Times, pero la redacción del diario de Nueva York vuelve a ser una referencia. Así lo ha decidido el jurado de los premios Pulitzer que ha entregado cinco galardones a este periódico. Es la segunda vez en su historia que gana tantas menciones en los Oscars del periodismo y ya suma 101 desde que se le concedió el primero en 1917.
La noticia del escándalo sexual de Eliot Spitzer y la caída de esta gran figura política, entonces gobernador de Nueva York, una fotografía llena de fuerza de Barack Obama en un acto público bajo la lluvia, o un artículo sobre ex militares ayudando a las campañas de propaganda del Pentágono durante la legislatura de George Bush. Son algunos de los trabajos que han merecido el reconocimiento más importante del periodismo. A ellos se suma la labor de la crítica de arte Holland Cotter y de la redacción en general por la profunda cobertura sobre los problemas militares y políticos que enfrenta EE UU en Afganistán y Pakistán, «unos reportajes hechos frecuentemente bajo condiciones peligrosas).
Con este reconocimiento, por tercera vez en la historia se conceden más de cinco premios en un año al mismo periódico. El año pasado se galardonó a The Washington Post con seis y en 2002 The New York Times consiguió el récord de siete. Este año el Post, ha ganado uno por las columnas de Eugene Robinson.
Uno de los premios más celebrados, el de servicio público, fue galardonado a The Las Vegas Review Journal por un artículo de investigación sobre las muertes de trabajadores en las obras de esta ciudad de Nevada.
Además haciendo un guiño a los nuevos tiempos digitales, por primera vez el comité del Pulitzer ha aceptado valorar trabajos que aparecen en publicaciones on line y no impresas en papel. El primer premio de esta categoría ha recaído en un proyecto de The St. Petersburg Times, Politifact.com , una iniciativa con la que durante la campaña se examinaba la veracidad de los hechos citados por los políticos.
En la categoría de novela de ficción el premio ha sido para Elizabeth Strout, por su obra Olive Kitteridge, una colección de 13 historias cortas sobre una ciudad pequeña en el estado de Maine. El premio del Drama es para Lynn Nottage por Ruined, un impactante relato sobre el sufrimiento de las mujeres en el Congo que actualmente se representa en un teatro de Nueva York