Sentimentalismo, exigencias en la relación podrían ser algunas cosas que le causen ruido a los hombres, aunque esto no significa que las quieran menos sólo por tener ciertas mañas
Oscar Wilde no podía estar equivocado cuando escribió esta frase: “Las mujeres han sido hechas para ser amadas, no para ser comprendidas”. Las relaciones humanas son complejas, hay muchos comportamientos que los hombres no logran entender de las mujeres y viceversa. Según un artículo publicado en la revista Psicología Hoy, muchas mujeres tienden a quejarse por miedo de comenzar una discusión. El peligro con esto es cuando existe mucha frustración y resentimiento entre las parejas casadas, la relación se podría tornarse tóxica.
El noviazgo es sólo la primera etapa donde la pareja se está conociendo. Sin embargo, aquí podrían detectar ciertos rasgos de la pareja que podrían resultar molestos. Por ejemplo, una pareja tiene planes de verse el jueves por la noche para tener una cena romántica. Ella sabe perfectamente que todos los jueves su pololo se junta con los amigos a jugar poker. Sin embargo, ella planea esa cena con el fin de pasar más tiempo con el pololo. Sin mucha sorpresa, el pololo le dice que no puede dejar de ver a los amigos. Ella, enfurecida, le cuelga el teléfono, se resiente y no lo pesca por el resto del fin de semana.
Para una mujer ese sería un escenario espantoso y para él mucho peor. “El hombre podría sentir que la mujer está invadiendo su libertad”, explica Salomón Magendzo, psicólogo. Por lo que la pareja necesitaría abordar el tema urgentemente para evitar malos entendidos. Al igual que las mujeres, los hombres también valoran y necesitan pasar tiempo entre ellos. Lo más importante es ser claro y decirle: “Tú me exiges más de lo que yo puedo darte”, sugiere el psicólogo.
Aquí otras cosas que los hombres no terminan de entender sobre las mujeres.
La necesidad de pelar a otras mujeres Hablar con la mejor amiga sobre todo lo que ha pasado en la última semana puede ser rutinario y normal entre mujeres. Por otro lado, los hombres no terminan de comprender cuál es la necesidad de hablar una hora sobre lo pésimo que le quedaban los zapatos a la mujer que se subió al metro.
“Aunque el hombre lo encuentre una estupidez, si a la mujer le gusta pelar a otras mujeres, es asunto de ella quien tiene que madurar”, agrega el psicólogo.
Usar el sexo como arma “Si un hombre dice que no quiere tener sexo, la mujer comienza a pensar que no es deseable y queda la embarrada. En cambio, cuando una mujer dice que no tiene ganas, lo posponen”, dice la psicóloga Claudia Araya.
Hablar en código ¿Qué te pasa? Nada. Todo hombre deberá saber que cuando una mujer responde que nada le pasa, claramente tiene que seguir indagando. Lo cierto es que los hombres no se complican tanto como las mujeres que esperan que su pareja sea un adivinador que logre leer entre líneas.
“Un hombre le debería decir a la mujer que le molesta que no hable de forma directa para mejorar la comunicación y así saber qué le esta pasando y ver qué puede hacer por ella y evitar los mal interpretaciones”, añade Magendzo.
Sentimentalismo exagerado Un estudio publicado recientemente por Science Express demostró que los químicos en las lágrimas femeninas bajan la excitación sexual cuando los hombres sienten el olor. Dicho estudio fue hecho por científicos del instituto Weizmann en Israel.
“Es un plano difícil aunque los hombres deberían de ser tolerantes frente a una mujer sentimental”, concluye el psicólogo Magendzo.
El Nacional