Permanecer concentrado mientras haces una tarea que exige atención es posiblemente uno de los mayores retos productivos a los que te tienes que enfrentar. Es sumamente fácil despistarse y distraerse con casi cualquier cosa y en algunas personas esto es un verdadero problema.
Por un lado tenemos nuestra mente, una poderosa fábrica de pensamientos pasados, presentes y futuros. Por otro las distracciones e interrupciones externas sobre las que a veces sí a veces no tenemos control.
¿Por qué la necesidad de permanecer concentrados? Porque en tanto en cuanto lo hagamos conseguiremos dar lo mejor de nosotros mismos en cada cosa que hagamos. La concentración te hace mejor. Cuando estás concentrado clavas un clavo, cuando estás desconcentrado no sabes ni dónde poner el clavo.