Daily Archive: jueves, noviembre 11, 2010

Curso-Taller Indicadores de salud familiar

Dirigido a: Especialmente a estudiantes de Psicología, Medicina, Enfermería, y profesionales de la Salud, y público en general

Lugar: Facultad de Hunanidades, UASD

Costo: RD$ 600.00

Duración: 8 horas

Incluye: Certificado y material de apoyo

Facilitador: Idarmis González Benítez, Msc.

Organizado por: Facultad de Hunanidades & Escuela de psicología UASD

Teléfono: (809) 686-0193 ext. 344

Cupo limitado a 50 personas

Este artículo tiene por finalidad hacer una breve reseña de la psicología en Chile. Su intención es dar una visión de su desarrollo histórico, instituciones, número de profesionales y especialidades, su formación y su situación jurídica en el ejercicio de la profesión. Como todo trabajo comprende una serie de datos objetivos -tales como fechas y nombres- junto con una apreciación personal de los autores sobre los mismos.

Desarrollo histórico

En todo fenómeno histórico, existe un proceso previo de gestación y de conformación de los elementos que les darán origen. En el desarrollo de la psicología chilena encontramos un período pre-histórico o de gestación que dio origen a las instituciones actuales. En 1890 y 1893 dos maestros especialistas en Educación primaria, señores Schneider y Villalobos, publicaron sendos estudios sobre el origen de las sensaciones y sobre la psicología aplicada (1). y en 1900, el profesor de Filosofía de la Universidad Católica de Santiago, Rafael Fernández Concha, publicó un tratado sobre el hombre como persona psicológica, social y religiosa (2). En 1908, el profesor del Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, Doctor Guillermo Mann, fue comisionado por la Universidad para adquirir en Alemania el material necesario para la creación de un Laboratorio de Psicología Experimental, del cual fue su primer Director. Parte de este material traído a Chile fue seleccionado personalmente por W. Wundt, quién orientó en esta labor al Doctor Manna.

Leer más…

Los intelectuales hacen falta. ¿Para? Para parir sentidos Para ayudar a pensar, a crear planteos y abordajes, a generar nuevos enfoques. Para servir, de esas formas, a la vida siempre renovada. Para aportar a una sociedad el vuelo de crecimiento abstracto sin el cual las sociedades se empantanan. A continuación voy a enumerar y aclarar algunos de los preconceptos que dan lugar a una intelectualidad menos potente de lo que sería deseable. Son las ideas falsas que limitan el alcance y la potencia de nuestro mundo intelectual.

La inteligencia es pensamiento crítico se cree que el rasgo central de la capacidad de pensar es la posibilidad de criticar lo dado. Este concepto falla por dos lados. Cuando la crítica es mera expresión de negatividad, plantea una posición reactiva. Y cuando la crítica es observación objetiva (crítica no quiere decir hablar mal de algo) de todas maneras tiene un aspecto empobrecedor: supone la perspectiva de un juicio necesario y de una objetividad de base. Al mundo no hay que enjuiciarlo, hay que quererlo. No hay que buscar desarrollar ‘pensamiento crítico‘, hay que buscar generar entusiasmo, cuna del hacer y del crear. Sí, la crítica de todas maneras ocupa un lugar en el movimiento de la inteligencia: pero uno secundario, no el lugar de reina que ocupa hoy.

Leer más…