La ovulación se produce en medio del ciclo menstrual y es el período en el cual el óvulo emigra del ovario hacia el útero, donde se implantará si es fecundado. Durante este período, es vulnerable a la penetración de los espermatozoides y por tanto a la fecundación.
El calendario de ovulación es difícil de establecer, pues existen múltiples factores que pueden incidir en él, alterando su curso previsible. Además, existen mujeres con ciclos irregulares, que no poseen una ovulación uniforme, por lo cual es necesario tomar en cuenta otra serie de factores para determinar el momento preciso de la misma.
Usos del calendario de ovulación
Para ayudarnos a determinar el calendario de ovulación, tanto en las mujeres de ciclos regulares, como en las de ciclos irregulares, emplearemos una serie de elementos auxiliares.
Existen diferentes métodos para determinar en qué momento se producirá la ovulación: la observación del flujo vaginal; la temperatura basal; la presencia de hormona luteinizante (LH); la observación microscópica de la saliva o el flujo vaginal.
Observación del flujo vaginal a través del ciclo menstrual, el flujo vaginal sufre diversos cambios que la mujer puede apreciar. Durante los días no fértiles, por lo general, no existe dicho flujo, y se conocen como días secos. En caso de que el flujo se presente en estos días, será blanquecino y de consistencia densa, que impedirá el paso de los espermatozoides a través de la cerviz uterina.
Al aproximarse la ovulación, en mitad del ciclo, el flujo vaginal adquiere transparencia y es menos denso, hasta tornarse líquido en el momento de la ovulación. Los cambios se originan en los aumentos de los niveles de estrógeno producido por los ovarios. Luego de la ovulación, el flujo cambia nuevamente y se hace más pegajoso por la disminución de estrógeno. O sea, se pierde fertilidad.
Temperatura basal esta forma de determinar el día de la ovulación consiste en tomar la temperatura diariamente, antes de levantarse de la cama, a la misma hora y con el mismo termómetro, hasta completar una tabla mensual, durante varios meses. Las fluctuaciones en la temperatura sirven para determinar la ovulación. La temperatura corporal de la mujer oscila entre 36.5 y 36.7ºC, previo a la ovulación. Y aumenta en 0.5ºC, luego de la misma, lo que permite determinar el día de ovulación.
Es más efectivo tomar la temperatura debajo de la lengua o rectal, para mayor exactitud. Cuando la temperatura llega a su pico, se mantendrá durante tres días a ese nivel, mientras se produce la ovulación. El cambio de temperatura se debe a la presencia de progesterona, que actúa en la segunda parte del ciclo.
La hormona luteinizante es una proteína que controla la ovulación y la secreción de progesterona. Se determina su presencia mediante una prueba de orina. Existe un test casero para esta hormona.
Observación microscópica de la saliva y el flujo existe un test farmacológico para determinar los días fértiles de la mujer, basado en la observación al microscopio de una muestra de saliva o flujo vaginal. Puede usarse muchas veces durante un año, lo cual es una ventaja.