La ONG Save The Children ha alertado de que hay más de 70.000 niños desplazados en Japón que han perdido sus hogares y han tenido que refugiarse en centros de evacuación a causa del terremoto ocurrido el pasado viernes.
Según ha informado la ONG, su personal se ha trasladado al país nipón para asegurarse de que los menores reciben la protección y el cuidado necesarios para que puedan volver a su vida normal lo antes posible.
«Estamos muy preocupados por los 70.000 niños refugiados en centros de evacuación, que nada tienen que ver con un hogar y pueden provocarles miedo y ansiedad», ha explicado el coordinador del equipo de Save the Children en Japón, Stephen McDonald, que ha advertido del riesgo de que «muchos» menores hayan sido separados de sus padres y familiares.
La organización tiene un equipo en Sendai, una de las zonas más afectadas, y está estableciendo una base de operaciones para proporcionar ayuda de emergencia a los niños afectados y sus familias. Además, ha indicado que hay equipos en camino desde Tokio para crear una red de espacios seguros para niños y niñas donde puedan jugar y que permitan a los padres darse un descanso mientras se registran para obtener ayuda de emergencia o buscan a otros familiares.
La ONG de infancia ha indicado que son necesarios al menos cinco millones de dólares para hacer frente a sus necesidades, entre las que se encuentran el apoyo psicológico, el establecimiento de espacios seguros o controlar la situación en las zonas cercanas a las plantas nucleares.