Aun sin dinero, se puede premiar a los empleados

Para las empresas con pocos fondos, existen formas no monetarias de recompensar a los trabajadores con buen desempeño

Usted ha logrado preservar su trabajo durante la recesión y los recortes de personal. Pero puede haber asumido más trabajo sin pago adicional, o quizás hasta aceptó un recorte salarial. Sin embargo, a medida que la economía comienza a recuperarse, algunas empresas buscan remunerar mejor a sus trabajadores.

«Las compañías inteligentes reconocen que no estamos donde estábamos en 2009», cuando los trabajos desaparecían por doquier, señala John Challenger, presidente ejecutivo de Challenger, Gray & Christmas, una firma de consultoría de reubicación laboral. Y algunas empresas ya comienzan a contratar. Por lo tanto, «tratan de entender quiénes son sus mejores empleados y cómo retenerlos», agrega.

Las empresas prevén incrementos salariales por mérito de 2.7% en 2011, comparado con 2.3% en 2010 y 1.6% en 2009, según una encuesta a 1,046 compañías realizada en abril, mayo y junio por Towers Watson, una firma de servicios profesionales de Nueva York.

«Los empleados esenciales tienen una posición de negociación más fuerte», explica Laura Sejen, directora global de consultoría salarial de Towers Watson.

En cuanto a los empleados de empresas cortas de dinero, los expertos dicen que pueden pedir retribuciones que no necesariamente aparezcan en su sueldo. A continuación, algunas opciones.

Horarios flexibles

Permitir que alteren su horario de trabajo puede ser una retribución atractiva para empleados dedicados, señalan los expertos.

«Puede darse que alguien diga: ‘Quiero irme a casa a las 3 p.m. para estar con mis hijos'», dice Challenger. «Muchas veces, estos tipos de arreglos pueden ser individualizados. Podría ser llegar un poco más tarde o trabajar desde la casa los viernes».

Las compañías pueden considerar la posibilidad de permitirles a los empleados comprimir su semana laboral, por ejemplo, trabajando 10 horas al día, cuatro días a la semana, en lugar de ocho horas al día, cinco días a la semana.

«Están utilizando eso como una metodología para enganchar a los empleados sin que le cueste dinero a la empresa», explica Milton Perkins, director de consultoría sobre soluciones de fuerza laboral de Agile 1, una firma con sede en Torrance, California. «Al final, todo se basa en producción».

Capacitación y más funciones

Los empleadores pueden enseñarles nuevas habilidades a sus empleados como retribución, afirma Perkins. «Incremente el conjunto de capacidades [de sus trabajadores] con la esperanza de que en el futuro, si la oportunidad se presenta, ellos estén cualificados para asumir puestos mejor remunerados», explica.

Si bien expandir las funciones de los empleados no es garantía de un aumento de sueldo, recalca Perkins, darles trabajos más variados puede ayudar a mantenerlos interesados, quizás incluso más que con un incremento salarial.

«Si yo le doy un aumento de 2%, usted no saltará a través de un aro de fuego», asevera Perkins. «Yo hablo de cosas intrínsecamente más motivadoras, con las que la gente se siente mejor estando en el trabajo, y por lo tanto hay más productividad».

Desarrollo de carrera y pago de clases

Otra opción es hacer que los empleadores paguen por cursos, seminarios, conferencias y membresías en grupos profesionales, sugieren los expertos.

«Es una inversión para la empresa, pero el empleado también obtiene algo», opina Bob Cartwright, presidente ejecutivo y fundador de Intelligent Compensation, una firma de consultoría de remuneración y recursos humanos cerca de Austin, Texas.

Los trabajadores pueden pedir tomar clases para desarrollar capacidades, y aquellos que son muy productivos pueden incluso pedir un nivel más alto de reembolso, dicen los expertos.

Las compañías ganan al obtener empleados mejor capacitados, mientras que los trabajadores aumentan sus destrezas.

Pequeños gestos

Los pequeños gestos pueden ir muy lejos. Cartwright recomienda que las firmas adopten medidas como recompensar a sus mejores empleados con una cena. Los jefes en empresas minoristas pueden ofrecer mayores descuentos a los empleados.

«No es dinero en efectivo, pero proporciona [a los empleados] la oportunidad de obtener más bienes y servicios», agrega. «Estas son las clases de pequeñas cosas que ayudan a crear un mejor ambiente. La gente lo pensará dos veces antes de irse con la competencia para obtener 25 centavos más la hora cuando saben que trabajan en un gran entorno».

Ruth Mantell | Wall Street Americas